Vivimos en un mundo que está en constante evolución, en un updating contínuo de contenidos, pero también de formas. Los modos ya no son los que eran y se imponen los libros digitales sobre el papel, las agendas electrónicas sobre la tinta y las videoconferencias sobre las citas. Todo está "aquí" y nada junto a nosotros. Ni me quejo, ni critico: adaptarse o morir.
Teorías evolucionistas a parte, este espacio sólo pretende ser un lugar de confluencia, uno adaptado a los nuevos usos, en el que, seguramente, se plantearán más preguntas que se darán respuestas. Pongamos de moda el método socrático y que nadie tema la cicuta, ya no hay Dioses a quienes negar.